Las dalias en los agroecosistemas tradicionales/ Dahlias in traditional agroecosystems

Las dalias (Dahlia sp.) son flores nativas de México. En ocasiones, las confunden con los crisantemos (Chrysanthemum sp.) por tener características morfológicas similares. Sin embargo, los crisantemos son nativos de Asía y Europa. Pero, tienen más flores liguladas; ambas especies pertenecen a la familia botánica Asteraceae. Las dalias, por lo general, crecen en lugares elevados, templados y fríos. Estas flores, en su entorno natural están asociadas con la vegetación pino-encino e integran el sotobosque.  

Dalias silvestres

Los campesinos de las regiones templadas de México, además de cultivar plantas, crían animales de traspatio (gallinas, guajolotes, borregos, chivos, toros, entre otros); ambas actividad son esencia de la agricultura campesina. La finalidad de criar animales es para consumo y venta.  Las gallinas y los guajolotes son resguardados en corrales durante la noche y durante el día están libres. Se alimentan de hierbas, maíces y lombrices. Pero, suelen tener constantes conflictos con las amas de casa, porque se comen las flores y hojas de las plantas medicinales, aromáticas y ornamentales que cultivan en los huertos familiares. Sin embargo, contribuyen con la productividad de los agroecosistemas. La gallinaza y el estiércol son utilizados como fertilizantes naturales en los sistemas agrícolas.

Toro en la orilla de una milpa

Los chivos y los borregos los pastorean en los cerros y en las parcelas después de cosechar. Al pastorear en los cerros, -los campesinos y sus esposas- tienen distintas tareas sustanciales. Por ejemplo, cortan trozos de ramas de los árboles para la leña y ocote para hacer el fogón. También, recolectan plantas silvestres que son utilizadas con fines medicinales, algunas estructura botánicas con fines alimentarias; como las flores de maguey. Y en épocas de lluvia, recolectan hongos. Además de plantas atractivas para después trasplantarlas en el patio de sus casas y en las orillas de la milpa. Algunas de ellas son: la flor de hielo (Gentiana spathacea Kunth), la flor de mayo (Sprekelia formosissima (L.) Herb.) y las dalias (Dahia sp.).

Flor de dalia

Las dalias silvestres son flores compuestas de múltiples colores, pero con pocas flores liguladas situadas en el entorno del receptáculo; diferente a las dalias cultivadas y mejoradas, que tienen múltiples flores liguladas y que las hacen ser más atractivas. En México, las usan como ornamentales, medicinales, en ceremonias religiosas y culturales. En los últimos años, le han puesto mayor atención e interés en las investigaciones científicas, por su valor nutricional y nutracéutico. Los chefs, aprovechan las raíces tuberosas de las dalias para crear platillos exóticos. En algunas instituciones de investigación fomentan su consumo en términos prácticos (gelatinas, jarabes, bebidas, licores, otros).

Dalias cultivadas

Los campesinos conservan las dalias de manera in situ al plantarlas en las orillas de las milpas, con la finalidad de darle estética a la parcela. Pero, además tienen otras funciones biológicas; contribuyen con la conservación y diversidad de los agentes polarizadores entomológicos. Y es posible que fomenten el sinergismo entre artrópodos. En invierno las plantas se secan por completo y en verano inician su floración. Toleran el estrés hídrico por déficit de humedad y sus raíces tuberosas les permite almacenar agua.

Cabezuela deshidratada 

Las dalias cultivarlas en las orillas de las milpas y sobre terrazas interactúan y hacen simbiosis con otras plantas, por ejemplo, con los magueyes. El maguey contribuye en la conservación de la humedad y aporte de nutrientes. Al secarse sus pencas (hojas) generan materia orgánica rica en nitrógeno, que les permiten a las dalias y a otros cultivos agrícolas tener mejor desarrollo vegetativo y turgencia.

Dalias silvestres cultivadas sobre terrazas y orillas de la milpa

Se cree que las dalias fueron cultivadas desde épocas prehispánicas y formaban parte de los remedios medicinales de los diferentes grupos sociales. Por lo que, es posible que fueron cultivadas antes de la llegada de los españoles a México. A finales del siglo XVIII se cultivaron las primeras dalias en Europa. Sin embargo, en las primeras décadas de ese siglo algunos botánicos europeos hicieron recolectas de esta planta en territorio mexicano. El material de germoplasma recolectado permitió ampliar su base genética y por ende "diversificar la horticultura en Europa".

Dalias que crecen con pinos y encinos  

En 1818 los Europeos iniciaron a concebir mejoramiento genético de las dalias. Crearon inflorescencias de distintas formas y colores. Los nuevos cultivares se distribuyeron en los jardines botánicos de Alemania, Francia e Inglaterra. A raíz de los trabajos de mejoramiento genético permitieron crear el jardín de dalias en Hamburgo, Alemania. Este jardín tienen más de 5 mil flores de distintas variedades que impresionan a sus visitantes.

Dahlia pinnata Cav.

Las dalias en México, ademas de ser ornamentales tienen importancia económica. Por ello, durante los primeros años de la década de los 60's del siglo pasado, fue propuesta como flor nacional. Algunas instituciones de investigación y enseñanza de México, trabajan e indagan el origen de su cultivo y mejoramiento genético. Consideran que al ser México el centro de origen de esta especie, su material genético debe de ser parte del patrimonio biológico y cultural nacional.

Dalias con distintos colores

Los jardines de México, son poco complejos al contrastarlos con los jardines de otras regiones del orbe. En la actualidad, las autoridades locales incursionan diferentes especies vegetales -algunas de ellas son exóticas- en los jardines de plazas y sitios públicos. Su diseño y arreglo topológico esta lejos del objetivo de los jardines de Asía, los cuales son diseñados como centro de meditación y relajamiento o como el de algunas naciones europeas que son parte de sus superficies agrícolas.

Sin embargo, México tiene una gran riqueza biológica en plantas, pero también existe un sin fin de inquietudes, basado en las acciones de su población, un ejemplo de ello, es ¿por qué no se utilizan para fines?. Una estrategia que podría ser factible en términos económicos y ecológicos, al ser plantadas y adaptadas a condiciones ambientales y climáticas. Además, permitiría reducir costos de energía, insumos y financieros para su cuidado, reducir el uso de agua y fertilizantes ¡no se requiere de grandes cantidades!. Sí el objetivo, es tener sombra, un árbol nativo contribuye a este fin. Sí se requiere apreciar las maravillas de la naturaleza, colores, textura y aromas, muchas de las plantas nativas, también lo hacen.

Las dalias y otras plantas arvenses nativas contribuyen con este objetivo. En algunas partes del mundo venden las semillas de plantas arvenses mexicanas (p.ej. especies del género Cosmos, Erigeron, Tagetes, entre otros).

Literatura de interés

Lara-Cortés, E., Martín-Belloso, O., Osorio-Díaz, P., Barrera-Necha, L. L., Sánchez-López, J. A., y Bautista-Baños, S. (2014). Actividad antioxidante, composición nutrimental y funcional de flores comestibles de dalia. Revista Chapingo. Serie Horticultura 20 (1): 101-116.

Salgado, E. (2013). ¿ Sabes cuál es la flor nacional de México?. Boletín de divulgación del herbario HGOM Hidalgo, México, 17.